5 errores comunes en el emprendedurismo y cómo evitarlos

Emprender no es un camino fácil. Es muy normal tener altos y bajos en el proceso, como en cualquier otro reto de la vida. Por ello, si es la primera vez que te vas a adentrar en el mundo del emprendedurismo, en este post hablaremos sobre los errores más comunes al emprender y cómo evitarlos.

La idea es que al final de este artículo tengas mayores herramientas para prever dificultades y alcanzar el éxito con tu negocio.

Pero antes, hablemos sobre algunos mitos y realidades que nos pueden llevar al fracaso.

Mitos y realidades sobre el emprendedurismo

El emprendedurismo es mucho más que la creación de una empresa. Este término se refiere a la capacidad de organización y manejo de riesgo que implica todo el proceso de fundar un nuevo negocio.

En otras palabras, emprender requiere cierto tipo de mentalidad para poder enfrentar los altos y bajos que encontrarás en el camino. Sin embargo, muchas personas se llevan sorpresas desagradables porque solemos tener ideas equivocadas sobre qué es emprendedurismo o emprendimiento.

Dicho esto, estudiemos algunos mitos y realidades que debemos considerar para no equivocarnos:

Mito: ser tu propio jefe significa menos trabajo

Ser tu propio jefe puede darte más flexibilidad para establecer tus horarios y métodos de trabajo. No obstante, también requiere mayor responsabilidad y disciplina. Si vas a emprender, necesitas tener objetivos profesionales, proactividad y muchísima organización.

Realidad: necesitas invertir mucho tiempo

Muchas personas suelen tirar la toalla a mitad de camino porque creen que pueden hacer crecer un negocio dedicando un par de horas a la semana. Pero, la realidad es que el emprendedurismo requiere compromiso. Por lo tanto, si quieres llegar lejos con tu negocio, necesitas tomártelo como un trabajo de tiempo completo.

Mito: puedes hacerlo todo por tu cuenta

Emprender no es una tarea para una sola persona— aunque la idea sea tuya. Para impulsar tu empresa, deberás asesorarte con profesionales que te ayuden a estructurar un buen modelo de negocio. Además, necesitarás socios y aliados para establecer responsabilidades y crecer. Después de todo, nadie es un Dios omnipresente y omnipotente para ocuparse de todos los aspectos de una empresa al mismo tiempo.

Realidad: el inicio será lento y agotador, pero valdrá la pena el sacrificio

Es común que muchas personas se desanimen al ver que su negocio no está produciendo lo que quisieran. Y es que, muchas veces, tomará algunos meses agarrar fuerza para comenzar a percibir ganancias. Por esa razón, es vital ser constantes y tener la mentalidad correcta para emprender.

Los 5 errores más comunes al emprender

Habiendo aclarado un poco cuál es la realidad sobre el emprendedurismo, estos son los errores más comunes que debes evitar al dar tus primeros pasos:

1. No investigar tu mercado a profundidad

Uno de los errores más frecuentes entre los nuevos emprendedores es empezar demasiado rápido sin haber hecho una buena investigación de mercado. Antes de lanzarte al público con cualquier producto o servicio, necesitas aterrizar tus ideas y definir un target.

Cuando quieres iniciar un nuevo negocio, debes dedicar bastante tiempo a estudiar las características de la industria en la que vas entrar. Esto incluye explorar las opciones de rentabilidad, la demanda de tu producto o servicio y, por supuesto, tu competencia.

Nunca subestimes a tu competencia y asegúrate de analizar muy bien qué están haciendo los demás y cómo lo puedes hacer mejor. Recuerda que tu propuesta debe ofrecer valor al consumidor para destacar.

Esta fase de investigación de mercado es fundamental porque deberás planificar tu plan de marketing en función de tu público objetivo y metas de empresa.

2. Tener una mentalidad cerrada ante los cambios

Muchas veces, los emprendedores se enamoran ciegamente de sus ideas e ignoran la posibilidad de tomar nuevas direcciones. Esto no solo te hace ver como un mal líder, sino que además puede conducirte rápidamente al fracaso.

El emprendedurismo implica atreverse a tomar riesgos. Claro, siempre considerando todos los distintos escenarios que pueden surgir con cada decisión.

En algunas oportunidades, esos riesgos se traducirán en transformar tus ideas iniciales, cambiar de mercado, modificar tu estrategia de marketing, o hacer inversiones importantes. Cualquiera que sea el caso, como buen emprendedor debes escuchar críticas y asesorarte con expertos para velar por el crecimiento y la seguridad de tu empresa. Incluso si eso significa salirse del plan original.

3. No formar un buen equipo de trabajo

Todo buen emprendedor debe saber delegar responsabilidades.

Como bien comentábamos más arriba, nadie tiene las capacidades para llevar una empresa por sí solo. Por eso, es importantísimo construir un equipo de trabajo sólido y funcional con personas capacitadas y roles definidos.

En ese sentido, al momento de establecer la estructura de tu negocio, no solo debes enumerar las responsabilidades de cada miembro del equipo, sino que también debes escoger a las personas indicadas. Y sí, algunas veces deberás tomar decisiones difíciles como despedir amigos o familiares porque no aportan valor para la empresa.

Al final del día, cuando se trata de negocios, debes pensar como jefe y no como amigo.

4. Ignorar los aspectos legales

Parte de la planificación que debes tener antes de abrir tu negocio al público es ocuparte de los asuntos legales. Para evitarte problemas, asesórate con un abogado e investiga los requisitos necesarios para registrar tu empresa. Igualmente, debes atender otros aspectos como derechos de autor, impuestos, nómina y demás.

También, dependiendo de la industria en la que estés, deberás obtener ciertas licencias o permisos para evitar sanciones. De nuevo, tener la ayuda de un abogado es vital para resolver toda esta parte legal. Sobre todo porque cada país tiene sus propias reglas, así que debes sentarte a investigar a profundidad.

5. No tener un plan de negocio

Muchísimas personas han intentado incursionar en el emprendedurismo sin ningún plan de negocio. Hay quienes solo se mueven con la expectativa de ganar dinero, pero no se toman la molestia de planificar acciones estratégicas para crecer. Y claro, al no tener objetivos, estructura, ni pasos a seguir, es muy difícil conseguir cualquier logro.

En líneas generales, un plan de negocio es un documento que define la organización y el funcionamiento de tu empresa. Dentro de él, debes incluir la siguiente información:

• Visión, misión y valores de tu empresa.
• Detalles del mercado, productos o servicios ofrecidos, cómo producirlos y cuánto cuestan.
• Modelo de negocio y plan de marketing para conseguir clientes.
• Estados de flujo de dinero, detallando gastos e ingresos, proyecciones y estimaciones financieras.
• Identificación de roles dentro de la empresa.

Un plan de negocio es la clave para el éxito de tu emprendimiento. Es la base sobre la que vas a trabajar y en donde vas a detallar tus objetivos, estrategias, y administración financiera.

Si quieres saber más, te dejamos esta guía para hacer tu plan de negocio, publicada por Entrepeneur.

cómo afrontar los errores en el emprendedurismo

Si bien podemos estar conscientes de los errores más comunes al emprender, es completamente normal que te equivoques al dar tus primeros pasos. A medida que vayas ganando experiencia, tendrás más madurez para lidiar con los retos que conlleva el emprendedurismo.

Con eso en mente, te dejamos algunos consejos básicos para afrontar tus errores:

• Hay cosas que funcionan y otras que no. Por ello, no temas en cambiar de estrategia si ves que no estás alcanzando tus metas de negocio.
• Aprende de tus errores pasados. Esto puede sonar un poco obvio, pero a veces no somos conscientes de cuáles fueron las acciones que nos llevaron al fracaso en el pasado. Aquí es cuando entiendes la importancia de llevar un plan de negocio y mantener registro de todos tus movimientos como empresa. De esta manera, será muy sencillo identificar lo que estás haciendo bien y lo que debes mejorar en el futuro.
• ¡Busca ayuda! El emprendedurismo se basa en saber rodearte de expertos y aliados para llegar más lejos.
• Pide opinión a los consumidores. Si algo no ha salido bien o no sabes qué dirección tomar para los próximos pasos, escucha a tu audiencia. Esto es parte de estar abierto a los cambios y las críticas constructivas.

Últimas recomendaciones

El verdadero truco para tener un emprendimiento exitoso es la constancia y la planificación. Como mencionamos anteriormente, ocúpate en fijar objetivos claros y armar un plan de negocio con acciones estratégicas y contundentes para permanecer relevante en el mercado. No olvides mantenerte en constante aprendizaje y asesorarte con expertos.

Como última recomendación, nos gustaría resaltar que, aunque debes captar talentos para el crecimiento de tu empresa, tu verdadero foco debe estar en mantenerlos dentro de tu equipo. Un buen líder se preocupa por el bienestar de su negocio y su personal, así que debes fomentar la motivación y el respeto entre todos.

En el emprendedurismo, no existe ninguna fórmula infalible para el éxito, así que no te mortifiques si tienes algunos tropiezos. Lo importante es levantarse y seguir adelante. Con el tiempo, verás que las cosas se harán más sencillas.

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