Espí­ritu emprendedor: ¿qué es y cómo desarrollarlo?

Mucho se ha hablado sobre emprendimiento y cómo empezar un negocio, pero, ¿has escuchado sobre el espíritu emprendedor? Si no estás seguro de qué se trata y qué importancia tiene para la evolución de una empresa, has llegado al lugar correcto.

En este artículo, hablaremos sobre cómo desarrollar esta cualidad para impulsar el crecimiento de tu negocio.

Pero, antes de llegar a eso, vamos con una definición general del concepto:

¿Qué es espíritu emprendedor?

Puede que al escuchar el término ya te hagas una idea de lo que implica. Sin embargo, para dar una definición precisa, el espíritu emprendedor es una actitud para afrontar riesgos y tomar acciones contundentes en búsqueda de un cambio. Es una mentalidad y forma de actuar que involucra ciertas cualidades como pensamiento crítico, creatividad e innovación, servicio, autoconfianza, ambición y liderazgo.

Una persona con espíritu emprendedor es aquella que no se queda sentada esperando que “algo” suceda para reaccionar. Más bien, este individuo tiene iniciativa y motivación para cambiar o mejorar su entorno por sí mismo. Igualmente, cualquiera que comparta este modo de ver la vida tiene mucha pasión y dedicación para realizar sus proyectos.

Por supuesto, esta mentalidad es clave para emprender, pues funciona como la gasolina que impulsa la creación de un negocio a partir de una idea.

Características del espíritu emprendedor

En general, podríamos decir que una persona con espíritu emprendedor tiene las siguientes características:

• Motivación y ganas de aprender constantemente
• Deseo de superación
• Creatividad
• Capacidad para resolver problemas eficientemente
• Humildad y empatía
• Ética
• Ambición
• Visión de futuro
• Seguridad
• Apertura al cambio
• Inteligencia emocional
• Constancia y dedicación
• Liderazgo
• Pasión por lo que hace

Todos estos son elementos de la personalidad que muchas veces son innatos en las personas emprendedoras. Pero, aun así, son aspectos que puedes trabajar y mejorar para desarrollar un mejor perfil emprendedor.

De igual manera, estas características no solo son beneficiosas para iniciar un negocio, sino que también son útiles para mejorar tus relaciones interpersonales y profesionales, además de otros aspectos de tu vida más allá del trabajo.

¿Por qué es importante esta cualidad para el desarrollo de tu negocio?

Si bien es cierto que para asegurar el crecimiento de una empresa necesitas más que una buena actitud, tener espíritu emprendedor sin duda impulsa este desarrollo.

En líneas generales, esta cualidad envuelve un conjunto de habilidades, aspectos de la personalidad, y formas de pensar que son esenciales para liderar un proyecto— sin importar qué tan grande o pequeño sea. Además, transmite confianza y motivación para atrapar a socios, empleados, e inversores.

Del mismo modo, recordemos algo fundamental: emprender no es fácil. Tomar este camino de vida implica hacer muchos sacrificios y aprender a lidiar con la incertidumbre y el estrés. No obstante, también puede ser muy gratificante, pero no todos tienen la fortaleza mental y disciplina para seguir adelante hasta ver estos beneficios. Y es justamente por eso que es tan importante tener espíritu emprendedor.

En resumen, esta cualidad es primordial para impulsar cualquier tipo de negocio y mantener la resiliencia y pasión necesarias para llegar más lejos. Y todo esto sin mencionar la grandísima habilidad para detectar oportunidades que esto conlleva.

Ahora bien, como ya sabemos, muchas personas tienen esta característica naturalmente, pero igual hay maneras de despertarla, trabajarla y fortalecerla. Esto nos lleva al siguiente punto:

¿cómo desarrollar tu espíritu emprendedor? – 9 claves para conseguirlo

1. Trabaja tu creatividad

Para algunos, ser creativo puede sonar como un súper poder que solo pocos tienen. Pero, en realidad, la creatividad se puede ejercitar como si fuera un músculo de tu cuerpo.

Leer todos los días, buscar un nuevo hobby, meditar, y llevar una bitácora de ideas son algunas opciones que tienes para mantener tu mente despierta y creativa.

También, escuchar música o ver una película analizando su estructura o contenido más allá del entretenimiento son maneras de alimentar tu mente. En este caso, funciona como un ejercicio para estudiar una pieza creativa y descubrir las premisas que están detrás de ella. Este proceso, inevitablemente, lleva a nuevos pensamientos que pueden derivar en ideas para desarrollar más adelante.

2. Lee y estudia constantemente

La lectura es un hábito fundamental para mantener tu mente activa y despertar tu espíritu emprendedor. No solo funciona para alimentar tu creatividad sino también para formarte y encontrar inspiración.

Además de leer libros o guías para mejorar tu perfil de emprendedor, puedes complementar este trabajo con cursos o talleres para reforzar ciertas habilidades. Mientras más herramientas tengas, más lejos podrás llegar, y es por eso que nunca puedes dejar de aprender.

Si buscas lecturas recomendadas para emprendedores, te dejamos algunos libros para empezar:

• La Guerra Del Arte de Steven Pressfield – Para trabajar tu creatividad y seguridad.
• The $100 Startup de Chris Guillebeau – Sobre cómo empezar un negocio con poco dinero.
• Nunca comas solo de Keith Ferrazzi & Tahl Raz – Para hacer networking y crecer como emprendedor.
• El método Lean Startup de Eric Ries – Sobre cómo crear un emprendimiento exitoso en la actualidad.
• Las 22 leyes inmutables del marketing de Al Ries y Jack Trout – Para entender cómo crear una buena marca para tu negocio.

3. Trabaja en tu liderazgo

Un buen emprendedor es un buen líder, por lo que debes esforzarte por trabajar esta cualidad.

El liderazgo va más allá de saber organizar un equipo. También necesitas autoconfianza, asertividad, compromiso, capacidad de tomar decisiones, entre otros aspectos. Si notas que te hace falta algún entrenamiento en esta área, puedes tomar cursos o leer algunos libros para adquirir nuevas herramientas que te ayuden a ser un mejor líder.

4. Ten mente abierta a los cambios

Parte de tener espíritu emprendedor es desarrollar capacidad de adaptación y resolución de problemas.

Cuando emprendemos, nos enfrentamos a muchos elementos que no dependen de nosotros y que pueden afectar nuestros planes (sea para bien o para mal). Por eso, debemos mantenernos flexibles en todo momento y dispuestos a cambiar para adaptarnos al contexto.

No le tengas miedo a los cambios y mantente listo para reaccionar ante cualquier eventualidad.

5. Mejora tus habilidades sociales

Este punto está bastante ligado al anterior. Un emprendedor debe saber comunicarse efectivamente y crear buenas relaciones con otros. Esto implica tener asertividad, buena oratoria, y respeto al hablar. Adicionalmente, la persuasión es primordial para emprender, y es una habilidad que se puede aprender y desarrollar en el tiempo.

Si te cuesta expresarte o eres muy tímido/a, puedes empezar por apuntarte en alguna nueva actividad que te permita soltarte y perder un poco el miedo. El teatro y el baile son muy buenos espacios para esto. También, los clubes de debate o lectura son sitios donde puedes trabajar tus habilidades de comunicación.

6. Incrementa tu productividad

Un emprendedor es fanático de la productividad y ahorrador obsesivo del tiempo. Por ello, si quieres despertar tu espíritu emprendedor, es importante que aprendas a manejar mejor tu tiempo. Así, dejarás de lado la procrastinación y despejarás tu mente para que las ideas fluyan mejor.

Planifica una rutina diaria e incorpora un método de organización que se ajuste a ti. Puede ser una agenda, calendario, lista de tareas, o una combinación de todo.

Igualmente, busca una manera de administrar mejor tu tiempo que no perjudique tu concentración (por ejemplo, la técnica Pomodoro). Ah, y por supuesto, ¡no olvides dormir bien!

7. Mantente al día con las tendencias

Todo emprendedor se mantiene constantemente actualizado y enterado de las más recientes noticias y tendencias en el mercado. No puedes quedarte atrás, pues cada día puede surgir una nueva oportunidad de negocio para ti. ¡Aprovéchalo!

8. Ten visión a futuro y plantéate objetivos claros

Tener espíritu emprendedor está estrechamente relacionado con tener visión a futuro y motivación para llegar a donde quieres.

Si quieres que tu negocio tenga éxito, plantéate objetivos específicos y realizables. Empieza por objetivos pequeños, en el corto plazo, y ve incrementando en función de tus expectativas y plan de negocio. De esta manera, podrás avanzar con más seguridad hacia un norte definido.

9. ¡Conócete!

Todo buen emprendedor se ha tomado la tarea de conocerse más a profundidad para reconocer sus fortalezas y debilidades. Hacer este ejercicio te permitirá identificar las áreas de tu personalidad o habilidades que necesites pulir para continuar tu crecimiento personal y profesional.

Algunos temen mirarse a sí mismos, pero si quieres llegar más lejos es vital conocerte bien antes que cualquier otra cosa. Puede que, durante ese proceso, descubras cosas sobre ti que no sabías y que puedes utilizar a tu favor.

Igualmente, al entender cuáles son tus puntos débiles, puedes buscar socios o asesoría con personas que puedan llenar ese espacio y complementar tus fortalezas para impulsar tu emprendimiento.

Espíritu emprendedor + organización: la mezcla del éxito

El espíritu emprendedor es un componente fundamental que determina la fuerza con la que actúas para conseguir tus metas. Pero, como imaginarás, toda esta pasión y energía necesita de organización para producir beneficios reales. Si no, perderías tu tiempo en ideas sueltas que no terminan de llegar a ningún sitio.

Todo negocio necesita de una buena planificación con objetivos reales para crecer. De lo contrario, podrías pasar muchísimos años tratando de definir quién eres como empresa y qué es (verdaderamente) lo que quieres conseguir.

Recuerda: la pasión es importante, pero también necesitas un lado racional que pueda equilibrar todas esas emociones y utilizarlas como combustible.

¿Quieres saber más sobre emprendimiento?

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¡Mucho éxito!