7 caracterí­sticas del emprendedor que NO pueden faltar en tu perfil

El éxito no llega por casualidad. Si quieres convertirte en un emprendedor de éxito, necesitas desarrollar ciertas habilidades y aspectos de tu personalidad para lograrlo. ¿No sabes por dónde empezar? Pues, en este artículo te contaremos sobre 7 características del emprendedor que debes incorporar en tu perfil.

¡Comencemos!

¿Cuáles son las principales características del emprendedor?

Antes que nada, debemos aclarar que el perfil del emprendedor engloba muchísimas cualidades, habilidades y formas de pensar. Sin embargo, cada persona es única y tiene muchísimas cosas diferentes que aportar. Por eso, antes de definirte a ti mismo como emprendedor, debes determinar qué talentos y aspectos de tu identidad te destacan por encima de los demás.

Una vez que entiendas quién eres y qué cosas te definen, es momento de desarrollar la actitud empresarial que necesitas para emprender. Después de todo, un emprendedor no solo debe estar consciente de sus talentos, sino también de tener las herramientas ideales para afrontar los retos de iniciar un negocio.

Entre la gran cantidad de cualidades y habilidades que puedes trabajar, hay 7 principales que NO pueden faltar:

1. Creatividad

La creatividad es la principal característica de una persona emprendedora. Y es que ser emprendedor no es igual a ser un gestor. Los enfoques son completamente diferentes: el gestor administra eficientemente, mientras que el emprendedor crea e innova.

Un emprendedor debe mantener viva su creatividad para un crecimiento continuo de su negocio. Además, la creatividad no solo sirve para pensar en nuevos productos, sino que también ayuda a desarrollar soluciones efectivas a problemas y a mejorar otras áreas de la empresa. Igualmente, es una habilidad que no solo funciona en los negocios sino en tu día a día.

Como explica Luis Pardo Céspedes, experto en crecimiento de empresas y liderazgo, las empresas competitivas se valen de la creatividad como herramienta principal para innovar en distintos aspectos. Esta innovación puede ser desde presentar mejoras en tu producto hasta pensar cambios en el modelo de negocio para mejorar el funcionamiento de la empresa y la estructura interna del equipo.

Si consideras que no eres una persona lo suficientemente creativa, puedes empezar a entrenar esta habilidad con estas prácticas:

• Lleva un diario de ideas que puedas revisar constantemente.
• Lee, escucha música, y ve películas. Empápate de contenido que despierte tu cerebro.
• Busca inspiración en otros.
• Dedica un tiempo para hacer actividades que te gusten. Eso ayudará a despejar tu mente para motivar tu creatividad.
• Plantéate nuevas formas de hacer tus tareas diarias. Este ejercicio es genial para salir de tu rutina y darle un nuevo estímulo a tu mente.

2. Proactividad

La proactividad es una de las características del emprendedor más notables. Esta cualidad se refiere a la capacidad de actuar rápido, mantenerse alerta, predecir situaciones futuras, y tener iniciativa para resolver problemas.

Un emprendedor nato se mantiene en constante movimiento y tiene una actitud activa ante la vida. En otras palabras, los emprendedores no esperan que las cosas sucedan sino que toman las riendas de su propio destino y trabajan estratégicamente por sus objetivos.

La naturaleza proactiva del emprendedor se alimenta de su iniciativa, productividad, y pasión inagotable.

3. Liderazgo

Todo emprendedor de éxito debe trabajar en su liderazgo. Al emprender, debes asumir nuevas responsabilidades y aprender a formar equipos de trabajo, delegar tareas y supervisar el funcionamiento de todos los departamentos de tu nueva empresa.

Ser un buen líder va más allá de decirle a otros qué hacer o de planificar un cronograma. Tener liderazgo implica tener asertividad, empatía, determinación, y una buena comunicación con otros. Asimismo, debes mostrar seguridad, ética, y valores humanos para inspirar confianza en tu equipo.

Por otro lado, a pesar de que necesitas ganarte el respeto de tu equipo y tener decisión y autoridad en tu empresa, debes dejar tu ego atrás. Tu personal es valioso y sus ideas merecen un espacio. Entonces, no te enfrasques en tus propias opiniones e ideas; tómate el tiempo de escuchar qué tienen los demás para decir.

De igual manera, respeta sus espacios privados, celebra sus logros, y mantenlos motivados. Recuerda que ellos son el capital humano que mueve tu emprendimiento, así que debes hacerlos sentir a gusto en su trabajo.

4. Seguridad

Muy relacionada con el punto anterior, la seguridad es otra de las más grandes características del emprendedor— y también de las más duras de construir.

Trabajar en tu autoconfianza y transmitir esa seguridad a los demás es clave para atraer más oportunidades. Además, tener determinación en tu manera de actuar inspira muchísima confianza de parte de tu equipo y ayuda a construir tu perfil como líder.

Aunado a esto, debes tener un plan de acción sólido y ser firme con tus decisiones y la manera en que planteas tu negocio. De lo contrario, nadie tomaría en serio tu proyecto.

Obviamente, emprender conlleva muchos riesgos y es inevitable pasar por momentos de incertidumbre. Pero, tener seguridad no se trata de tener siempre todas las respuestas, sino de entender que no puedes detenerte ante cualquier obstáculo. En vez de enfrascarte en tus dudas y miedos ante un momento de crisis, utiliza esa incertidumbre como motor para pensar nuevas estrategias y dar con las mejores soluciones.

Si quieres desarrollar tu autoconfianza, puedes empezar por entrenar ciertas habilidades:

• Mejorar tu oratoria.
• Corregir tu postura y trabajar tu comunicación no verbal.
• Ser asertivo.
• Reconocer tus talentos y cultivarlos. ¡Evita compararte con los demás y enfócate en ti!

5. Curiosidad

El emprendedor es curioso por naturaleza. Parte de tener actitud empresarial es mantenerse constantemente buscando oportunidades de negocio y estar al día con las tendencias.

No obstante, entender la curiosidad como una de las características del emprendedor va más allá de esta búsqueda de oportunidades. Ser curioso en este contexto implica también tener una sed insaciable de conocimiento. Uno como emprendedor siempre quiere aprender nuevas habilidades para tener más herramientas a mano que puedas usar a tu favor.

Mientras más indagues sobre un tema, más cosas tendrás para aprender (y más beneficios podrás sacar de allí). Entonces, utiliza la curiosidad como vehículo para hacer despegar nuevas ideas; nunca sabes en dónde puede haber una nueva oportunidad de negocio.

6. Disciplina

Puedes tener mucha pasión, visión a futuro y seguridad, pero si no tienes disciplina, difícilmente podrás triunfar con tu negocio.

La disciplina es una cualidad básica de cualquier emprendedor de éxito. Esto implica tener organización, ser constante, y optimizar tu método de trabajo para conseguir mejores resultados.

Sumado a esto, debes ser paciente y confiar en tu trabajo duro y enfocado. Cuando te atreves a emprender, pasarán algunos meses antes de que puedas ver el fruto de tu esfuerzo. Parte de tener disciplina es ser perseverante a pesar de que a veces quieras desistir.

El camino al éxito y a la libertad financiera es largo y requiere de mucha responsabilidad y compromiso, pero ten la seguridad de que al final valdrá la pena.

7. Ambición

La ambición es una de las principales características del emprendedor, y va muy ligada a su pasión y visión a futuro.

A veces, la ambición puede ser vista con malos ojos. Sin embargo, en el mundo de los negocios, esta virtud es estrictamente necesaria para triunfar. Y, contrario a lo que muchos puedan pensar, la ambición no tiene nada que ver con la codicia ni el egoísmo, sino con la auto proyección y la búsqueda permanente por ser mejores cada día.

Tener ambición es una cualidad que alimenta la motivación del emprendedor para no rendirse a mitad del camino. Es importante tener grandes aspiraciones y velar por el crecimiento continuo de tu negocio.

Evidentemente, estas expectativas deben combinarse con un plan de acción bien definido y estructurado, con objetivos realistas, medibles, y realizables en espacios de tiempo determinados.

Otras características del emprendedor

Ya vimos las 7 principales cualidades del emprendedor, pero hay muchísimas más que vale la pena desarrollar para construir un perfil sólido como empresario:

• Humildad
• Capacidad de adaptación
• Receptividad y apertura a los cambios
• Honestidad
• Habilidad para gestionar negocios y recursos (tanto humanos como monetarios)
• Persuasión
• Toma de decisiones
• Networking

Para finalizar…

Si bien hay ciertas características del emprendedor que vale la pena desarrollar, estas no aseguran el éxito en tus negocios por sí solas. Todos estos aspectos sirven como punto de partida para construir un buen perfil de emprendedor, pero debes combinarlos con un trabajo constante y enfocado para conseguir tus metas.

Un emprendimiento exitoso depende, entre muchos factores, de un balance entre pasión, organización y constancia. Por supuesto, el camino estará lleno de retos, y es por ello que debes construir una actitud emprendedora para superar estas pruebas.

Para ello, empieza por cultivar estas cualidades y habilidades que vimos acá. La mejor parte es que características pueden ayudarte muchísimo a mejorar tus relaciones interpersonales y la manera en que enfrentas tu día a día. Al final, todo se trata de crear una mejor versión de ti como persona y emprendedor.

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